El packaging del futuro

La tecnología está cambiando la manera en la que nos relacionamos con los envases. Además de hacerlos más atractivos, nos permite aportar un valor añadido, acercarnos a nuestro público objetivo y ahorrar costes.

La principal ventaja de la realidad virtual es que puede proporcionar información precisa y realista de cómo se verá el packaging una vez finalizado, como, por ejemplo, los colores, las texturas o las decoraciones.

La impresión 3D permite a los fabricantes probar ideas de diseño antes de comprometerse con la producción; esto reduce el tiempo y el coste para lanzar un nuevo envase al mercado. Es muy útil para solucionar rápidamente posibles inconvenientes de diseño, en lugar de empezar con el proyecto desde cero.

Los envases con códigos QR son una buena forma de aportar un valor añadido ya que permiten ofrecer información adicional de la marca o el producto, creando un nuevo canal de comunicación con el cliente.

La robótica ayuda a generar procesos de producción y almacenamiento eficientes, ahorrando tiempo y recursos. Además permite automatizar tareas, haciéndolas más rápidas y fáciles de completar.

Con la realidad aumentada podemos visualizar un objeto a través de una pantalla o dispositivo móvil y trasladarlo a cualquier entorno físico para visualizarlo e interactuar con el diseño y el espacio.